El proceso de Formación catequética que se ofrece en el Templo de "San José" (El Ranchito), tiene la finalidad de llevar gradualmente al cristiano a un mayor conocimiento y adhesión a la persona de Jesús de Nazaret y su Buena Noticia, como un camino para amar y transmitir el don de la fe.

Por tal motivo, buscamos que en este proyecto se involucre toda la familia, pues abarca a la totalidad de nuestra existencia. Así, no solo los niños, sino también los adolescentes, jóvenes e incluso los padres de familia o adultos, pueden introducirse en esta aventura que es dejarse seducir por Jesús de Nazaret, para conocerle, amarle y seguirle, y de este modo puedan vivir y contagiar la alegría de ser cristiano y el gozo de la salvación.
Conviene, por tanto, deshacerse de un mal entendido reduccionista, según el cual se considera a la catequesis como un tiempo para recibir un Sacramento. Cristo es el gran Sacramento, y conocerle, amarle y seguirle es un empeño de toda la vida y de la vida entera. Y cuanto más vamos creciendo más necesitamos a Dios. Si lo que se busca es un sacramento sin más, puede que la catequesis le resulte larga y pesada con el consiguiente engaño de abandonar la práctica de la fe tras haber conseguido dicho Sacramento. Si buscas a Dios sentirás el gusto de la necesidad y el vivo deseo de amarle.
Para descubrir el gran amor de Dios hacia nosotros la catequesis armoniza la apertura del corazón y la iluminación de nuestra mente, que transforma nuestra vida en verdaderos testigos de Jesús resucitado. Por consiguiente nuestra catequesis acentúa un perfil muy destacado en todo su itinerario:
   * Es una catequesis mistagógica:
                 Enseñar a adorar a Dios, orar y lograr una íntima amistad con el único Señor de nuestra vida.
                 Vivir desde el espíritu en amistad recíproca.
   * Es una catequesis Cristocéntrica:
                 La humanidad, la persona de Jesús, su vida y su Pasión,
                 revelan el amor del Padre y la vivificación del Espíritu Santo.
* Es una catequesis evangelizadora:
                 La Buena Noticia centra el contenido y la finalidad de nuestro desarrollo humano y cristiano en todas sus etapas.
* Es una catequesis eclesial:
                 Que se goza y se siente comunidad de hermanos, con una misma misión,
                 en comunión con nuestros pastores, en la más bella tradición y su diversidad cultural.
* Es una catequesis personalizada:
                 Atiende la realidad concreta de cada niño o persona, su momento existencial, su contexto familiar,
                 para que prenda en ella la gracia de la esperanza y de la salvación.

Quien tenga el gusto o sienta necesidad, está cordialmente invitado.
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